Conduce la bicicleta que puede hacerlo todo. La G22 1.0 PRO CARB corre sobre asfalto y flota sobre tierra, lo que la convierte en la máquina multisuperficie ideal para los ciclistas que cambian de terreno. A los roadies tradicionales que optan por pedalear sobre tierra les encantará la geometría específica del cuadro para grava, que aporta comodidad en superficies rugosas y viajes de larga distancia. El conjunto de grava Shimano 105 de calidad y los neumáticos con agarre CST Tirent preparan esta bicicleta para cualquier terreno o tipo de clima para que puedas pedalear durante todo el año. Conduce como un profesional allá donde vayas y siéntete seguro al recorrer caminos de tierra, caminos de incendios y asfalto lluvioso con la G22 1.0 PRO CARB, la rebelde bicicleta de tierra de Benelli que no conoce límites.
Grupo Shimano específico para gravel
La herramienta adecuada, el grupo Shimano 105 está diseñado para un alto rendimiento tanto en carretera como en condiciones de gravel. El casete de 11 velocidades 11/32t y los platos 50/30t ofrecen una amplia gama de cambios.
Aventura gravel con estilo y diseño italiano
Nuestro buen ojo para la estética permite que las bicicletas Benelli tengan un aspecto tan bueno como las salen. El modelo Pro está disponible en 4 elegantes combinaciones de colores para adaptarse a tu personalidad única.
Sale sin preocupaciones con el cambio trasero Shimano
Viene equipado con un mecanismo estabilizador de cadena integrado que evita los golpes y caídas de la cadena cuando se circula por terrenos irregulares y llenos de baches. El tensor de cadena tiene un interruptor ON/OFF para superficies más suaves.
Ritmo de bicicleta de carretera con capacidad todoterreno
The T800 carbon fiber frame has a more relaxed geometry than a pure road bike and the aggressive drop bars keep riders aerodynamic with plenty of comfortable hand positions.
Rápida en el pavimento y con agarre en la grava
Los neumáticos CST Tirent de alta calidad incluyen una capa adicional para mejorar la resistencia a los pinchazos. Con una anchura de 40 mm, es el tamaño de neumático de gravel más común.